SIGUEN SIN RECIBIR SUS PAGOS LOS EXTRABAJADORES DE GRUPO R
Los exobreros señalan que buscarán la intervención de las autoridades federales a fin de que se logre que el empresario tamaulipeco Ramiro Garza Cantú les pague lo justo, luego de nueve meses de espera.
REDACCIÓN
CIUDAD DEL CARMEN. 06/10/2021.- Miguel Francisco Rodríguez, exobrero de Servicios Marítimos de Campeche (SMC), en compañía de varios de sus compañeros, afirmaron solicitaran el apoyo de las autoridades federales para el pago de más de nueve meses de salarios y liquidaciones pendientes a alrededor de dos mil obreros en el municipio.
Los exobreros reportaron que luego de realizar las denuncias correspondientes ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, en la Procuraduría Federal de Defensa del Trabajador (Profedet), se acordó que durante el mes de septiembre se realizaría el pago de salarios y liquidaciones pendientes, sin embargo esto no ocurrió, hecho por el que consideran hay situaciones anomalas entre la instancia federal y la empresa del tamaulipeco Ramiro Garza Cantú.
“A la mayoría no nos han pagado desde 2021, muchos de ellos siguen vigentes en la compañía, otros ya fueron despedidos y dados de baja. La empresa no ha dicho absolutamente nada, no nos da respuesta y lo único que nos dicen es que no hay dinero y ahora que tampoco tienen fecha para pagar”, mencionó.
Rodríguez Urzúa, además agregó que los obreros han sido víctimas de falsas promesas, violando todas las garantías individuales. Señaló que por necesidad muchos trabajadores han aceptado las precarias condiciones laborales lo que ha detonado que expongan la integridad por la pésima calidad laboral en las plataformas y en patios de obra.
Explicó que los trabajadores que siguen laborando para esta empresa, les cobran el Seguro Social e Infonavit a pesar de no recibir las prestaciones, una vez bajan, lo que los deja indefensos. Expuso además que para evitar más demandas la empresa prometió contratar al personal despedido, pero que mucho personal no ha sido recontratado desde hace cinco meses y tampoco les han dado finiquito, por lo que han iniciadolas demandas laborales por el incumplimiento.